En Bariloche, la eléctrica local aprobó los balances de los últimos tres años en una extraña asamblea virtual…

En el transcurso de una extraña y llamativa asamblea virtual, la Cooperativa de Electricidad de Bariloche procedió a la aprobación de los balances de los últimos tres ejercicios económicos. De esta manera, la entidad cumplió con la asamblea general ordinaria fuera de término convocada de forma virtual y por medios telemáticos.

La CEB llegó a esta instancia en un contexto de fuertes polémicas y acusaciones de la oposición por la modalidad elegida para la realización de la asamblea que reunió a todo el cuerpo de delegados y los consejeros.

Según informó la cooperativa, durante a asamblea se pusieron a consideración y aprobaron la memoria y balance, cuadro de resultados e informe de comisión fiscalizadora y del auditor externo de los ejercicios 2020, 2021 y 2022. La entidad no detalló cómo resultó la votación.

El año pasado, la asamblea de la CEB no aprobó los balances de 2020 y 2021 por cuestionamientos de la oposición que también fueron llevados a la justicia. En esa oportunidad se trataron dos ejercicios porque las restricciones de la pandemia habían impedido a fines de 2020 realizar el acto asambleario.

La asamblea del 2021 se vio teñida por altas discusiones y escenas de «patoterismo», según definió el oficialismo que con esos antecedentes este año resolvió realizar la reunión de manera virtual.

También (y esto parece que fue un aspecto prioritario) se definieron los anticipos de retribución de consejeros y miembros de la comisión fiscalizadora del ejercicio cerrado en junio de 2022 y se fijó la retribución para las autoridades.

Suena extraño lo sucedido en la CEB. El INAES tendría que tomar cartas en el asunto y verificar si todo lo sucedido en esa extraña asamblea virtual, encuadra dentro de los lineamientos previstos en la Ley 20337.