La Eléctrica de Bariloche solicitó al Ente Regulador la aplicación de un ajuste de 35 por ciento en la tarifa

El presidente de la Cooperativa de Electricidad Bariloche, Carlos Aristegui (foto),  reconoció que «no nos hace mucha gracia llevar esta acción adelante, pero es imposible seguir manteniendo la calidad del servicio sin ajustar algunos puntos de nuestra tarifa».

Resaltó el contexto de suba permanente e inflación que «nos pega por todos lados, como asociados, consumidores, y empresa cooperativa, lamentablemente es imposible seguir absorbiendo y estamos haciendo una propuesta de incremento para bajar el desfasaje que estábamos teniendo».

El pedido de aumento es de un 35 por ciento. Explicó que compra de energía, combustible, todo aquello que tiene que ver con la energía son insumos que están atados al dólar, «eso nos golpea muy fuertemente, lamentablemente no hay muchas más opciones».

Recordó que la última revisión tarifaria extraordinaria fue el año pasado para solucionar un problema con el pago de salarios de los trabajadores de Luz y Fuerza. Además recordó que se están quitando los subsidios y ese incremento que se ve en la factura no se traslada a lo que necesita la cooperativa para funcionar. «Si bien el usuario ve incrementada su boleta, no se ve reflejado en el valor de distribución de la cooperativa e impacta en su funcionamiento», aclaró.

Aristegui resaltó que a muchos asociados les cuesta mucho estar al día, pero no obstante «el nivel de pago de los asociados es alto y nos ayuda a que esto pueda estar funcionando».

El directivo explicó que enviaron al ente regulador la propuesta de aumento y señaló que hay valores que han crecido mucho desde la última revisión tarifaria. Señaó que la revisión tarifaria es quinquenal y en 2018 se establecieron las inversiones que se están haciendo hoy, a un valor de 2018, con una facturación que no llegaba a los 80 millones de pesos y hoy la facturación está arriba de los 700 millones de pesos. «Los desfasajes son difíciles de absorber», señaló.

Reconoció que «no es lo que nos gusta hacer como consejo de administración pero somos responsables de que esto funcione, no es agradable», pero señaló que hace mucho tiempo que «la CEB no busca caer sobre los bolsillos de los asociados,  pero muchas opciones no quedan».

Por último, señaló que hay problemas con insumos importados como cables, que tardan en llegar y antes se pagaban en cuotas y hoy se debe pagar al contado.  «Estamos con un inconveniente importante, los insumos se siente que faltan», concluyó.