En Rosario, una cooperativa de cuidado de adultos mayores formalizó un acuerdo con la Municipalidad


Luego de formalizar un acuerdo con la Secretaría de Salud Pública de Rosario, la Cooperativa de Trabajo “La Fuerza del Oeste”, que se dedica al cuidado de adultos mayores, se convirtió en la primera entidad solidaria de este tipo en sumarse al sistema público de salud. Las tareas se desarrollan en el Hospital Víctor J. Vilela, de Rosario.

La secretaria de la cooperativa, María de los Ángeles Carranza, puntualizó que “nosotros en la cooperativa brindamos servicios de cuidado a niños, adolescentes y adultos mayores, tratando de abarcar todas las etapas de la vida. En este caso puntual la Secretaría de Salud de Rosario nos convocó para realizar tareas de cuidado en niños y adolescentes con padecimientos de salud mental”.

“Estas tareas están sujetas al tratamiento delineado por el equipo de salud que trata los diferentes pacientes. Actualmente, somos siete trabajadores y todos llevamos a cabo diferentes tareas, tanto de cuidado como administrativa, tratamos de ir rotando”, explicó la secretaria de Fuerza del Oeste, y agregó: “Estamos con muchas ganas de sumar nuevos asociados para poder crecer como cooperativa”.

En la sala donde trabajan hay niños, niñas y adolescentes que atraviesan situaciones críticas. Frente a esta oportunidad laboral inédita para una cooperativa del sector, María de los Ángeles Carranza aseguró: “Para nosotros la celebración del convenio sienta precedente para que el Estado construya políticas públicas junto a los trabajadores de la economía social. La participación de las cooperativas es importante en las tareas de cuidado, ya que pone en valor la tarea del cuidador como una alternativa al trabajo informal”.

“Creo que también resignifica el conocimiento popular de los barrios, de las mujeres que cuidan familiares; estas tareas de cuidado generalmente están asignadas a la mujer exclusivamente y no se obtiene una remuneración”, agregó la secretaria de la cooperativa.

Finalmente manifestó que “la cooperativa viene a poner un marco de formalidad y darle esa visibilidad a este trabajo que muchas veces no está ni bien remunerado, ni está reglamentado. A muchas mujeres las convocan para hacer una tarea de cuidado y terminan haciendo tareas de limpieza, que no forman parte de la tarea propia del cuidador. Entonces, creo que por eso también es importante la participación de las cooperativas”.