En Mendoza, la Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (FECOVITA) enfrenta un pedido de quiebra solicitada por la empresa española Iberte, que hasta hace poco tiempo fuera socia de la entidad argentina. La entidad ibérica reclama 26 millones de dólares. El dirigente Eduardo Sancho, que hasta hace poco tiempo fuera presidente de la entidad federativa, expresó que el pedido de quiebra «no tiene ningún sentido».
«Creo que el camino es tratar de llegar a un acuerdo y solucionar el tema en base al diálogo, porque a medida que se judicializa, más se traba y más se complica y sabemos que la justicia en este tipo de cosas es lenta y esto pone a Fecovita en una situación complicada que no le corresponde», expresó Sancho.
«El pedido de quiebra no tiene ningún sentido, esto se va a superar porque se está esperando a la justicia. La deuda con respecto a los activos de Fecovita no tiene significancia», añadió. La Cámara de Diputados mendocina aprobó un pedido de informes dirigido a las autoridades judiciales que deben fallar sobre el caso. Lo que se busca es celeridad para resolver el tema que afecta a 5 mil productores locales.
Una de las hipótesis que se manejan por estas horas es si Iberte realiza este tipo de maniobras, que tanto productores como integrantes de la empresa sostienen que son coercitivas para quedarse con la totalidad de la empresa mendocina, Sancho descartó esta opción asegurando que: «Fecovita tiene un esquema muy complejo, no creo que a Iberte le convenga quedarse con la empresa. Fecovita sin las cooperativas y sin los productores es un cascarón vacío».
Por otro lado, el ex titular de la Federación de Cooperativas Vitivinícolas, se mostró de acuerdo con una mediación del gobierno mendocino para acercar a las partes. «Sería bueno que esto se resuelva con diálogo y que el gobierno llame a las partes y tratar de que exista una solución. Creo que es posible, se ha trabajado y se ha llegado a otros arreglos», puntualizó.
Para Sancho, «siempre es mejor un arreglo que un juicio, porque la situaciones en esos casos siempre son peores. La empresa (Iberte) está poniendo en juego el nombre de Fecovita y eso no tiene sentido», culminó.