Representantes de las federaciones de cooperativas que integran la Confederación Argentina Interfederativa de Cooperativas de Electricidad y Otros Servicios Públicos (CONAICE) expresaron su apoyo y solidaridad para con la Cooperativa Eléctrica de Bolivar, que el pasado martes fue blanco de una encendida manifestación por parte de asociados/usuarios que responsabilizaron a la misma por un prolongado corte de energía que, en rigor, fue ocasionado por la caída del tendido eléctrico a cargo de la empresa distribuidora provincial.
Ángel Echarren, secretario de la CONAICE, manifestó que las cooperativas en la provincia de Buenos Aires “no son responsables ni de la operatoria ni del mantenimiento de las líneas de subtransmisión de energía eléctrica que abastecen a sus localidades”. Y recordó que “son las distribuidoras provinciales quienes deben hacerse cargo de las mismas y garantizar la calidad de la energía que llega a los pueblos y ciudades. No es solo el caso de Bolívar”.
El dirigente subrayó que esta situación se repite en distintos puntos de la provincia de Buenos Aires en donde son las cooperativas las que “deben afrontar los costos, tanto político-institucionales como económicos, de la desinversión del prestador al cual le compran la energía”. En ese sentido, Echarren precisó que trabajan para que esta problemática sea visibilizada por el Estado provincial en el marco de la regulación eléctrica vigente.
Cabe recordar que el incidente que desató la manifestación de usuarios/asociados fue provocado por la caída de siete postes de madera que sostenían el cableado de media tensión y mediante el cual la empresa EDEN transporta la energía hasta la subestación de Bolívar. Se trata de las dos líneas de 33 Kv que abastecen a la cooperativa, sobre las que ésta no tiene responsabilidad alguna, ni de su operación ni de su mantenimiento.
Una vez conocidos los incidentes, que fueron amplificados por medios masivos de comunicación a nivel nacional, las cooperativas eléctricas, a través de organizaciones de segundo grado, emitieron un comunicado en el que expresaron su profunda solidaridad con la entidad.
En el mismo, enfatizaron que los miembros de la cooperativa y de la comunidad de Bolivar fueron “víctimas de la mala calidad del producto recibido, en este caso la energía eléctrica, por parte de la empresa proveedora”.