El presidente de la Cooperativa Láctea Manfrey, Ercole Felippa, analizó las características del cooperativismo en la actualidad, la competitividad en la industria y las tendencias productivas y de consumo en el sector lácteo.
Al formular declaraciones al periodismo, el dirigente expresó que «el cooperativismo del siglo 21 tiene que estar adaptado a los nuevos tiempos, no concebido tal cual lo hicieron nuestros padres y abuelos. Sigue siendo una excelente herramienta de gestión empresarial con un alto contenido social, clave principalmente en el interior y en la actividad primaria».
Señaló seguidamente que «si vemos en el mundo la industria láctea, las más grandes, sea en Estados Unidos u Oceanía, son empresas cooperativas con una legislación acorde a los nuevos tiempos, donde hay una apertura de capital, donde un interesado pueda invertir en una cooperativa, pero con una legislación moderna. Obviamente que hay malos ejemplos de cooperativas o seudocooperativas disfrazadas de activas que generan ruido”.
Con respecto a la innovación, manifestó que «es un proceso que no siempre tiene que ver con productos nuevos y distintos. El concepto de innovación tiene que ver con llegar al mismo objetivo a través de distintos caminos y que, obviamente, pueda ser de manera más exitosa, más económica, llegando al consumidor con más calidad y de forma más accesible. Puede ser una mejora en el proceso de elaboración para hacer el producto más competitivo y más eficiente”.
Al referirse a la competitividad, manifestó que “es sistémica, no tiene que ver solamente con el tipo de cambio, con la presión impositiva, con el clima de negocios, cuestiones que obviamente existen, pero vuelvo a insistir en el concepto de una mirada sistémica. También tiene que ver con lo que hacemos puertas adentro de nuestra cooperativa, en el mejor aprovechamiento de los recursos que tenemos para llegar al consumidor con un producto de la mejor calidad posible al menor costo posible”.
Finalmente, con relación a las tendencias en la industria láctea, señaló que “tenemos consumidores cada vez más exigentes que apuntan no solo a la inocuidad del alimento que van a consumir, sino que prestan atención a su packaging, por ejemplo. Argentina es, tradicionalmente, productora lechera, está en condiciones de poder producir leche en condiciones más competitivas que otros grandes productores, en condiciones amigables con el medio ambiente”.