Las cooperativas de servicios públicos de la provincia de Buenos Aires mantuvieron un importante encuentro con el gobernador Axel Kicillof, quien se comprometió a interceder ante la Secretaría de Energía de la Nación para evitar que se ponga en riesgo la provisión del servicio. Las entidades enfrentan una situación de emergencia por las deudas con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (CAMMESA).
“Las cooperativas eléctricas son fundamentales para brindar energía allí donde el mercado no ve un negocio rentable y asumimos la responsabilidad de defenderlas porque son un actor central para la producción, el bienestar y la calidad de vida en buena parte del territorio provincial”, sostuvo Kicillof, quien recibió a las entidades junto con el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Gabriel Katopodis, y el subsecretario de Energía, Gastón Ghioni.
Los dirigentes cooperativistas explicaron al mandatario provincial la situación de las entidades que brindan el servicio eléctrico en el territorio bonaerense y le comentaron que “durante febrero, la mayorista CAMMESA trabó embargos a varias cooperativas de la provincia que tenían deudas”.
Sin embargo, puntualizaron que “el porcentaje de deuda de las cooperativas bonaerenses es sumamente menor en comparación, por ejemplo, con las empresas de lucro, por lo que creemos que puede haber una clara actitud de discriminación con las entidades de la economía social”.
Seguidamente, le informaron a Kicillof que “las cooperativas eléctricas suscribimos un acuerdo donde Infraestructura y Energía establecieron trabajar en conjunto con el sector y contemplar un mecanismo de seguimiento de las decisiones que se adopten desde el gobierno nacional, a efectos de velar por el normal funcionamiento de las cooperativas y, en consecuencia, por el buen servicio para los ciudadanos de la provincia”.
Asimismo, trascendió que el Ministerio de Infraestructura bonaerense también se comprometió a actuar ante los organismos nacionales a fin de que no se ponga en riesgo el servicio eléctrico. “El embargo de una cuenta corriente de una cooperativa significa un cese de pago a proveedores locales y trabajadores, lo que puede derivar en una prestación de servicio ineficiente”, expresaron los dirigentes cooperativistas.
El presidente de la Federación de Cooperativas de Servicios de la Provincia de Buenos Aires (FECOOSER), Claudio Urio, fue uno de los referentes del sector que tomó la palabra en el encuentro con Kicillof: “Al privado no le interesa un pueblito de 500, 1.000 o 2.000 habitantes y al Estado le cuesta llegar por una cuestión de despliegue territorial, entre otras cosas; entonces, ahí estamos las cooperativas para atender a la gente”.
El presidente de FECOOSER no dudó en afirmar que “las cooperativas somos el pueblo organizado para prestar servicios y atender sus necesidades”.
En el mismo sentido, Urio remarcó: “Somos una gran mesa con muchas patas y tenemos que estar juntos porque estamos haciendo un esfuerzo enorme, estamos dispuestos a hacer el esfuerzo y acompañar en todo lo que sea necesario para el sostenimiento de las cooperativas y el desarrollo de los pueblos y localidades del interior provincial”.
Estuvieron presentes también en el encuentro con Axel Kicillof el ministro de Gobierno, Carlos Bianco; el presidente de OCEBA, Roberto Daoud, y representantes de APEBA, FICE, FACE y CRECES.