La Cooperativa de Electricidad de Olavarría (Coopelectric) comenzó a transitar, a partir del 31 de octubre ultimo, un período de profunda incertidumbre con respecto a su futuro desenvolvimiento. Sucede que el contrato de 25 años, con prórroga de 3 años, completando un total de 28 años de concesión, finalizó el último día de octubre pasado.
Los datos de la realidad indican que la cooperativa ha sido cuestionada durante años por deficiencias en la atención, interrupciones en el servicio y balances negativos, además de acumular deudas con el mayorista Camessa. Estas situaciones motivan al Municipio a evaluar alternativas que garanticen eficiencia y transparencia en la gestión de los servicios públicos.
El Consejo de Administración de Coopelectric y el Organismo de Control de Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires (OCEBA) ya fueron notificados. La ciudad iniciará la evaluación de un nuevo contrato o adjudicación para definir cómo se prestarán estos servicios estratégicos en los próximos años.
El fin de esta concesión marca un nuevo capítulo en la gestión de servicios públicos. Los vecinos podrán continuar contando con luz, agua y alumbrado público, mientras el Municipio asegura que la prestación sea estable y confiable durante la transición.
La pregunta que hoy muchos se formulan es: ¿Qué será del futuro de Coopelectric al ser marginada de la prestación de los servicios públicos? Indudablemente se trata de un interrogante cuya respuesta solo requiere tiempo…